lunes, 20 de abril de 2020

DÍA INTERNACIONAL DE LA TIERRA 22 DE ABRIL 2020


LA TIERRA ESTÁ EN CONFINAMIENTO

"La naturaleza sufre y nos dice que actuemos", dice el Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente, (PNUMA).  Y claro, lo hemos visto con  los incendios en Australia, los mayores registros de calor terrestre; con la peor invasión de langostas en Kenia, y  ahora con una pandemia sanitaria mundial con una fuerte relación con la salud de nuestros ecosistemas. 

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 Pero no es la primera vez, los cambios provocados por el hombre en la naturaleza, así como los crímenes que perturban la biodiversidad, como la deforestación, el cambio de uso del suelo, la producción agrícola y ganadera intensiva o el creciente comercio ilegal de vida silvestre, vienen desde hace mucho tiempo y pese a los llamados de atención, no paran.

Y como ya hemos visto,  la humanidad no está exenta de esos impactos. Como ha ocurrido con el tráfico ilegal de fauna y la aniquilación de los ecosistemas, esas prácticas pueden aumentar el contacto y la transmisión de enfermedades infecciosas de animales a humanos (enfermedades zoonóticas) y generar una catástrofe como la que estamos viendo hoy.
De acuerdo con PNUMA, una nueva enfermedad infecciosa emerge en los humanos cada 4 meses. De estas enfermedades, el 75% provienen de animales. Esto muestra las estrechas relaciones entre la salud humana, animal y ambiental.
Debemos actuar con decisión para proteger nuestro planeta tanto del coronavirus como de la amenaza existencial de las perturbaciones climáticas.

Con este panorama general y el escenario del coronavirus, la prioridad inmediata de la ONU es evitar la propagación de covid-19, pero a largo plazo, es importante abordar la perdida de hábitat y su biodiversidad.
La organización internacional también aclara que no podemos caer en el espejismo que nos plantea la pandemia. "El impacto visible y positivo del virus, ya sea a través de la mejora de la calidad del aire o la reducción de las emisiones de gases de efecto invernadero, no es más que temporal, ya que se debe a la trágica desaceleración económica y la angustia humana", dijo:

De ahí que invitó a los líderes mundiales, jóvenes, empresarios y campesinos a exigir un cambio hacia una economía más sostenible que funcione tanto para las personas como para el planeta.

Para ayudar a prevenir futuras pandemias como la del COVID-19,

debemos poner fin al comercio ilegal de vida silvestre y la destrucción de hábitats. No podemos seguir haciendo las cosa

como siempre. Debemos trabajar con la naturaleza, no en contra de ella.