"Nuestro trabajo que salva vidas para
proporcionar a los niños salud, educación, nutrición y protección nunca ha sido
tan crítico". - Director Ejecutivo de UNICEF
"Nunca
antes habíamos presenciado una interrupción educativa a tal escala ... La
asociación es el único camino a seguir". - Director General de la
UNESCO
A medida que COVID-19 continúa su marcha
alrededor del mundo, las Naciones Unidas están trabajando para reducir su
impacto negativo en los niños, quienes enfrentan nuevos riesgos de salud,
interrupciones en su educación y una mayor exposición a la violencia doméstica
y el hambre.
Algunas de las cifras dicen mucho sobre la
vulnerabilidad de los niños: el cierre de escuelas ahora afecta a más del 91
por ciento de los estudiantes del mundo. Más de 117 millones de niños en
37 países podrían perderse las vacunas contra el sarampión que salvan vidas, y
el 32% de los niños en todo el mundo que muestran síntomas de neumonía no son
llevados a un proveedor de atención médica.
Además, de los casi 31 millones de niños
en todo el mundo que fueron desplazados por la fuerza en 2018, 13 millones
fueron refugiados, 1 millón solicitó asilo y 17 millones fueron desplazados dentro
de sus propios países por la violencia y el conflicto.
En la mayoría de los países, más de 2 de
cada 3 niños son sometidos a una disciplina violenta por parte de los
cuidadores. Millones están en mayor riesgo de daño, ya que sus vidas se
mueven cada vez más en línea mientras están encerrados durante la pandemia de
COVID-19.