domingo, 6 de junio de 2021

PROTEJAMOS EL MEDIO AMBIENTE - NUESTRO HOGAR

 


En los últimos meses, la frase ha estado en boca de científicos, funcionarios y activistas ambientales: restauración de ecosistemas. Este año, el 5 de junio, Día Mundial del Medio Ambiente, se lanzará de manera oficial el Decenio de las Naciones Unidas sobre la Restauración de los Ecosistemas, un esfuerzo a 10 años para detener y revertir el deterioro del mundo natural.

Quizá te estés preguntando: ¿qué es exactamente un ecosistema y cómo puede restaurarse?

La respuesta a la primera pregunta es que un ecosistema es un lugar donde las plantas, los animales y otros organismos, junto con el paisaje que los rodea, se unen para formar la red de la vida.

Los ecosistemas pueden ser grandes, como un bosque, o pequeños, como un estanque. Muchos son cruciales para las sociedades, ya que proporcionan agua, alimentos, materiales de construcción y otros elementos esenciales. También brindan beneficios para todo el planeta, como la mitigación del cambio climático y la conservación de la biodiversidad.

Pero en las últimas décadas, el hambre de la humanidad por la extracción de recursos ha llevado a muchos ecosistemas al límite.

A continuación se describen los ocho principales tipos de ecosistemas y algunas de las cosas que pueden hacerse para revivirlos. Para obtener más ideas sobre cómo impulsar tus ecosistemas locales y unirte a la #GeneraciónRestauración, consulta la guía práctica para restaurar el planeta del Decenio de las Naciones Unidas.




Se destruyen bosques ininterrumpidamente. La tala, el corte de leña, la contaminación, las plagas invasoras y los incendios forestales están dañando lo que queda. Restaurar los ecosistemas forestales significa replantar y reducir la presión sobre los bosques para que los árboles vuelvan a crecer de forma natural. Los sistemas alimentarios son uno de los principales factores que afectan la pérdida de bosques. Reconsiderar la forma en que las personas cultivan y consumen alimentos puede ayudar a reducir la presión sobre los bosques. Las tierras de cultivo degradadas y en desuso pueden ser ideales para la restauración forestal, lo que también puede significar la creación de pequeños espacios boscosos en paisajes que incluyan tierras agrícolas productivas y asentamientos humanos.

¿Sabías que? Los bosques proporcionan un hábitat para 80% de las especies de anfibios del mundo, así como para la mayoría de las aves y mamíferos.